Un año en Juniper Group

 

El pasado 25 de octubre se cumplió un año desde que Hotetec pasó a formar parte de Juniper Group, compañía integrada en Constellation Software. Doce meses dan para mucho, y este aniversario es una buena excusa para mirar atrás, entender lo recorrido y, sobre todo, poner en valor lo que esta integración nos está aportando.

Crecer con perspectiva y ambición

Entrar en Juniper Group nos ha permitido observar nuestro crecimiento desde una perspectiva más amplia. No es solo una cuestión de tamaño o de pertenecer a un grupo internacional: es la oportunidad de compararnos, aprender y evolucionar dentro de un ecosistema que comparte estándares altos de gestión, producto y mentalidad empresarial. El cambio de escala nos obliga a levantar la vista y pensar en grande, sin perder la tracción del día a día.

Más visibilidad, más estructura, más futuro

La integración nos ha posicionado como empresa en un entorno altamente cualificado, con procesos y herramientas pensadas para operar con más alcance y precisión. En este año hemos migrado a un sistema con:

• Más visibilidad sobre el negocio y sus palancas reales.
• Un enfoque más holístico, conectando mejor operaciones, objetivos y ejecución.
• Un modelo más robusto, capaz de sostener un crecimiento ordenado.

Este salto de madurez organizativa no solo mejora cómo trabajamos hoy; también prepara el terreno para lo que viene.

Un camino con curva de aprendizaje (y sentido)

Sería poco realista decir que todo fue fácil desde el minuto uno. Los primeros meses fueron intensos y complejos, como suele ocurrir cuando se combinan culturas, métodos y ritmos distintos. Pero esa fricción inicial fue parte del proceso: se aprende más en las transiciones que en la comodidad.

Hoy, con ese tramo superado, podemos afirmar que ha sido un año de cambios, aprendizaje y enfoque estratégico. Hemos ajustado prioridades, afinado la forma de tomar decisiones y reforzado una visión más clara de hacia dónde queremos ir.

Resultados que nos dan gasolina

La mejor prueba de que este recorrido está valiendo la pena es que los resultados nos acompañan. No hablamos solo de números, sino de consistencia: mejorar capacidad, reforzar posicionamiento y ganar solidez operativa. Eso nos permite mirar al siguiente ciclo con confianza, pero también con hambre.

Seguiremos afrontando los próximos retos con la misma intensidad y filosofía de trabajo que nos ha traído hasta aquí: foco, exigencia sana, equipo y visión.